Mi lugar de desestrez, intentando descomprimir mi mente en palabras, pensamientos en consonantes...

espero no aburrirlos con mis historias, cada cosa que escribo lo hago con todo mi corazon disfrutenlo a cada segundo y a cada mirada ♥

miércoles, 21 de noviembre de 2012

The trisquel Cap 1



intentando comenzar a escribir hace 2 años que esto me daba vueltas en la cabeza, y por fin se esta conformando.
gracias por leer



....


9 años atrás 

-          Maxence cierra la puerta y quédate hay –max se quedo con su pequeña hermana antes de que su padre azotara la puerta de la habitación colindante donde estaba su madre, ambos niños se escondían en el armario, la casa era muy grande pero cada habitación escondida o secreta las conocía muy bien su padre.

Sasha sollozaba en los brazos de su hermano, max puso sus manos en los oídos de su hermana para que no escuchara nada, los golpes, el crujir de la madera, el cristal roto y los gritos de su padre, todo  se acumulaba en la mente del pequeño niño, demasiado joven para comprender lo que sucedía pero lo suficientemente maduro para saber que estaba en peligro, era supervivencia lo que le decía que estaba en peligro.
Por que había un hombre enojado que le gritaba a su madre pero no se parecía en nada al amoroso padre que lo arropo un día en la cama.

-          ese no es mi hijo –gritaba con desesperación el hombre, la carne cortándose seria un sonido que max jamás olvidaría.
-          Tranquila sasha –susurro bajo y apretó con mas fuerza a su hermana.

Los pasos se acercaron fuertes y dolorosos en el pecho del muchacho, con un simple golpe abrieron la puerta del armario.
Su madre grito, quitaron de sus brazos a su hermana.
El niño callo de bruces sangrándole la nariz, solo tenia 7 y nunca habia sido muy resistente a golpes, siempre sangraba y corria a los brazos de su madre.

-          Mama –dijo el niño.
-          Mama –repitio la pequeña, tratando de ponerse de pie.Su familia siempre habia sido la mas unida y respetuosa, jamas tuvieron algun problema con nadie, pero ahora todo eso parecia demaciado lejano y extraño casi una vision fantasmal.
-          por favor detente, no es culpa de max… el sigue siendo tu hijo –rogo la mujer, pidiendo piedad al hombre que ella creia amaba pero ella tampoco podía reconocerlo en esa mascara de furia que ahora llenaba su aspecto y corazón.

Él la miro con furia, y asco hacia el pequeño chico de ojos azules, azules como los de su madre y el moro cabello de su padre.
Si, él lo amaba pero no podia permitir que esa “cosa” siguiera hay.
La mente la tenia lavada hasta el fondo, se habia nublado su pensar en otras circunstancias no habria hecho lo que hizo.
Giro la pistola hacia su mujer y tiro del gatillo. 
El sonido hueco resono en la habitación, la pared detrás de la mujer se mancho de su sangre y habia pasado de un lila a un rojo azulino oscuro que traeria pesadillas por el resto de los dias de quien viviera.
Max como un corderito trato de moverse donde su hermana, ella por su parte grito max sabia que esa postura no era natural en su madre.
Sus ojos extraños y la mancha en el suelo que seguia creciendo.
La pequeña salto, con el horrible sonido, el chico se lo quedo viendo todo con el panico en sus ojos.
El hombre se limpia el sudor invisible que imagina en su frente, el arma aun en sus manos ya no le parece tan pesada, pero no habia mucho que pensar, no habia ni siquiera arrepentimiento de haber matado a la mujer que amo.
La niña lloro en un chillante e infinito llanto, un grito de desesperación de algo que no podia entender pero en su pequeña mente algo reacciono, un corte en alguna conexión  una zona oscura que se ilumino, no lo se pero algo sucedió por que la hermana de max corrió a las piernas de su padre, lo golpeo hizo lo imposible, por que a ese hombre lo aborrecia, la tiro con un solo golpe, saltando Sasha hasta golpear con otro mueble de la habitación la niña no emitio sonido alguno, max retrocedio un paso, su hermana no se movia, el estaba solo.
Se acerco con paso decido al muchacho con la mano libre del arma, directo hacia el cuello de max, que cerro los ojos ante el inminente final.
El corazon palpitando con fuerza, su respiración deteniendose en cada segundo, en cada suspiro.
La rabia llego dolorosa y calurosa, hay en su pecho agarro la mano de su padre por lo menos tres veces mas grande que la de el, su brazo comenzo a tener un extraño calor que el no repelio, las llamas como plumas suaves aparecieron en su antebrazo, se extendieron hasta su mano, que al tener contacto con su padre, flameo feroz, se expandieron rapidamente, mientras soltaba al muchacho, y gritaba por apagar sus llamas, pero estas llamas no las podia apagar con nada, max se cubrio la cara, sentir miedo, pena, y placer de aquella situación, hizo que las llamas lo cubrieran por completo, sin quemarlo sino como una fina capa.Su padre se quemaba vivo, gritando y pidiendo auxilio, el jamas le proporcionaria eso.
Las llamas no se detuvieron hasta que el hombre quedo, reducido a cenizas oscuras, que cubrian la habitación, como si tuvieran vida propia, tan rapido como aparecieron se fueron. 

Encontraron minutos mas tarde a max, el unico sobreviviente de aquella familia francesa, intacto sin ningún rasguño, lo interrogaron pero el jamas decia nada, el niño no hablaba.
Esa dia max, descubrio algo, algo que no podia controlar algo que luchaba por hacerse con sus sentimientos, eran salvajes, crueles, y poderosas.
Y el seguia pensando que no venian de el, el pecho se le cerro nuevamente en esa sala de interrogatorios, habia pasado horas hay, volvieron a cambiar a la mujer que le preguntaba, esta era mas amable pero max no hablaria.No habia causa en aquel incendio, y no entendian como habia consumido todo, aun asi Max seguia intacto.

La academia se hizo cargo, ellos sabian que habia ocurrido con el fuego, siempre lo sabían…  



Presente. 

Max siguió mirando por la ventana, recordar era inevitable.Miro su antebrazo nuevamente, las marcas que salieron desde dentro, las marcas que ardían con su atrevimiento, las marcas que deseaban controlarlo, casi como un sedante pero tan preciso cuando Max se proponía algo.
Allí estaban ellas recordándole, que había dejado de tener una familia hacia ya muchos años. 
Los oscuros recuerdos de su pasado, eran algo que la gente no debía saber, ni siquiera Sarah los conocía y era prácticamente su hermana. 

-          Max –Sarah hablo desde el umbral –olvidas que día es hoy?
-          Claro que no –se levanto del borde y camino hacia donde se encontraba Sarah.
-          Entonces porque aun no estás listo –Sarah siguió hablando mientras Max, pasaba al lado suyo y salía de la habitación –Annabelle no estará muy contenta si llegamos tarde.

Max había estado caminando con una sonrisa, hasta que Sarah dijo eso. 
Se detuvo de golpe y la miro.

-          Lo lamento, no debi decir eso –sarah bajo la mirada evitando los ojos de maxence.-          Entiéndelo, ella esta muerta.

Pero Sarah, ya lo sabia, no hacia falta que se lo recordara de esa manera, recordaba perfectamente cada instante de lo ocurrido.
Max entro a su habitación cerrando la puerta fríamente, expresando con ello todos sus sentimientos.

-          Annie… me hubieras perdonado algún dia lo que hice?

 


La moto se detuvo en seco frente el bar, “JOE” el letrero mostraba con grandes letras y luces, el seudónimo del lugar.
La muchacha se bajo, sintiendo el suelo bajo sus pies nuevamente, llevaba conduciendo hace horas y el cansancio ya le llegaba.
El lugar que había elegido para descansar no era exactamente lo que una muchacha sola y de su edad hubiera de propiciado, sin embargo el lugar era lo suficientemente solitario y recóndito para que pudiera de seguir su viaje con tranquilidad.

-          Que te sirvo muchacha –el hombre de no más de 50 años ofreció secando un par de vasos.
-          Con agua estará bien, solo voy de paso –el hombre movió las cejas y procedió a servirle –sabe dónde puedo encontrar un lugar donde hospedarme esta noche?
-          En la 50 pasando la granja, hay un lugar donde puedes quedarte, no es un hotel 5 estrellas pero lo suficientemente comodo, para los viajeros –la chica escucho con mucha atención, intentando olvidar e ignorar, lo que le gritaban las voces.
-          Muchas gracias, esto probablemente no me concierna, pero tenga mucho cuidado con los ladrones –en cuanto lo dijo, las voces se calmaron, ella se retiro rápido. 

En la 50 pasando la granja, encontró un motelucho, la luz de su letrero chispeaba y eso solo lo hacia mas tétrico, en la pequeña casucha de la entrada, pidió por una pieza, el recepcionista no muy acostumbrado al parecer que muchachas solas vinieran hay, pregunto.

-          Espera a alguien, tengo que dejar a alguien –en total confidencia, el seguía parloteando, ella lo miro seria, un tanto ofendida.
-          No, n°25 dijo? –el asintió. Las habitaciones lucían mejor de lo que aparentaban en el exterior, por ese lado esto se hacia un poco mas soportable.

En cuanto todo se quedo tranquilo nuevamente, las voces volvieron a gritar…
“annabelle, annabelle, querida annabelle” “no puedes ignorarlo mas annabelle” “que diría tu hermano annabelle” “tu madre ni siquiera te reconoce annabelle” “el tampoco estará aquí" Entre todas las voces, las imágenes llegaron como una punzada en su cabeza.

“un cementerio se alza entre un bosque espeso, estatuas con rostros reconocibles se encuentran en el, un placa dorada inscribe su nombre ANN…” la propia visión comienza a cambiar de manera brusca.
“ojos azules, observándola, a ella y a nadie mas que a ella susurros del pasado congelados en su mirada la corrompen, el cae mira hacia el suelo y atrapa su cabeza entre sus brazos, su boca se mueve simulando un grito sordo” 

Max volvía a aparecer en sus visiones, el asesino volvía deseando arrebatarle su vida, annabelle destapa la fotografía que guarda entre sus ropas.
7 chiquillos riéndose inocentes de su destino, aquellos eran tiempos muy diferentes.Dejo la fotografía a su lado y acaricio el rostro del joven de cabellos claros. 

-          Me hubieras perdonado lo que hice?

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martes, 20 de noviembre de 2012

Sucede

Es extraño ver este blog y verlo con un nombre nuevo, se que esas son cosas que a nadie le importa, a nadie le interesa recordarlo, cuando veía las antiguas entradas, me sentía enojada conmigo misma por haber compartido cosas tan privadas que me sucedían e intentaba interpretarlas en historias... compartirlas con personas cercanas, mi ex-bff, lindo decir eso, ver comentarios antiguos de su parte, me llenan de coraje, increíble como cambian las personas, las caras, y pareciera que ellos por fin muestran su verdadero rostro, engañando, traicionando, mintiendo.
mi coraje sigo trayendolo en el alma, no me desacere de el tan fácilmente.
soy una persona muy abierta de mente y corazón noble, hasta el momento en que me dañan descaradamente 
gracias por hacerme pensar que las personas son sumamente dañinas, gracias "AMIGAS"
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